El agua es el principal componente del cuerpo humano, posee 80 % de agua al nacer y cerca del 60 % en la edad adulta. Es por esta razón, que es importante mantener una adecuada hidratación, ya que cuando el cuerpo no tiene suficiente líquido, no puede llevar a cabo sus funciones básicas.
La buena noticia, es que hay opciones de hidratación más allá del beber agua, ya que existen alimentos formados en casi un 100% de agua, los cuales pueden ser un complemento perfecto al líquido que no llegamos a beber, y así conseguir una correcta hidratación.
El tomate es una de las opciones que la naturaleza pone a nuestra disposición. Este protagonista de casi todas las ensaladas, tiene un alto contenido de agua, es un alimento ideal para ser consumido a cualquier hora y en casi todos los formatos, ya que solo otorga beneficios al organismo.
Posee casi un 94% de agua, razón por la cual su poder hidratante es muy alto, además es fuente de fósforo y vitamina A y C, su pigmento rojo se lo da el licopeno, que es uno de los tantos pigmentos llamados carotenoides, que es un antioxidante natural, que tiene un efecto protector y preventivo contra el cáncer.
Alrededor de este fruto originario de América, se genera un debate, ya que es una fruta que se consume como una verdura, y de ahí la confusión. Considerada una fruta por ser la parte de la planta que contiene las semillas, y es así que botánicamente hablando, el tomate es una fruta a pesar de que no suele ser servida como tal.
En la actualidad, el tomate es uno de los alimentos más populares en Europa, debido en parte a su versatilidad, con gran facilidad puede ser combinado con una amplia variedad de alimentos y de hierbas aromáticas.
Existen aproximadamente cien variedades de tomates que se clasifican según su sabor, uso, tamaño y forma, divididas todas ellas en tomates para cocinar y tomates para ensalada. Todas estas opciones perfectas para darle a tu organismo un extra de hidratación y frescura, sobre todo en épocas estivales.
Para que saques el máximo partido de esta fruta en épocas de calor, te recomendamos esta tradicional receta de salmorejo cordobés, una deliciosa crema fría, que no dejará indiferente a nadie.
Receta para 6 personas:
· 1 kilo de tomates frescos ecológicos.
· 200 gramos de pan de hogaza.
· 150 ml. de aceite de oliva virgen extra.
· 1 diente de ajo.
· Sal al gusto.
Preparación:
Trituramos los tomates lavados, y los pasamos por un colador fino, donde nos quedará el tomate casi líquido.
Remojamos el pan con el tomate, dejando hasta que se impregne bien, después agregamos el diente de ajo y con un batidor o licuadora, trituramos bien hasta que todo los ingredientes estén bien incorporados.
Incorporamos poco a poco el aceite de oliva virgen extra y la sal, seguimos mezclando hasta tener un resultado cremoso y uniforme, con un vistoso color anaranjado, al que una vez servido podemos agregar tropezones de jamón serrano y huevo.
¡Qué lo disfrutes!
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