Sabes qué comes, pero… ¿y cómo comes?

De pie o sentado, con prisas o en calma, ¿has pensado alguna vez cómo comes?

Comer es el instinto más primitivo de los humanos y cuando el hambre llega nuestra parte más animal busca saciarse rápidamente y casi con cualquier cosa. ¿Os reconocéis en la situación de llegar a casa y abrir impulsivamente el frigorífico para echaros cualquier cosa a la boca? Un trozo de queso, una loncha de jamón, un sorbo de leche….

El acto de alimentarnos podemos limitarlo a la supervivencia o convertirlo en un ritual de bienestar, salud y placer. Sabemos que debemos mantener una dieta equilibrada, pero reflexionemos hoy de cómo son los momentos en los que nos detenemos (si es que lo hacemos) para disfrutar de la comida.

Estas son nuestras recomendaciones para favorecer la alimentación saludable, más allá de la distribución de nutrientes que debemos aportarle al organismo.

  1. Masticar bien.

De forma instintiva nacemos y crecemos dedicando el tiempo necesario a masticar los alimentos para ingerirlos. Es fácil tomar la actitud de insistirle a los niños para que coman más deprisa.

masticarSin embargo, esta función natural tiene su sentido. La labor digestiva comienza en la boca con la descomposición del alimento y su lubricación con la saliva que tiene como fin evitar problemas de digestión posteriormente.

Algunas recomendaciones para conseguir masticar más despacio son introducir bocados pequeños para no tener la necesidad de tragar si sentimos la boca llena, prestar atención y evitar distracciones; o disfrutar de los sabores y texturas de lo que masticamos para convertir estos momentos en instantes de placer.

 

  1. Mantener los horarios.

cómo comer bienEl hábito de comer aproximadamente en las mismas horas propiciará que estemos bien alimentados durante todo el día. Respetar el desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena minimizará los momentos de hambre en los que buscamos comer cualquier cosa de forma compulsiva.

Si cumplimos las cinco comidas diarias, además de mantener en orden el metabolismo conseguiremos permanecer en nuestro peso ideal o incluso adelgazar, al no comer fuera de horario y de forma abusiva. Igualmente, podremos prevenir enfermedades como la diabetes o el colesterol al tener un control de lo que comemos, sin caer en los excesos.

  1. Comer en familia

Este punto cobra especial relevancia en relación a los más pequeños.

Aunque las prisas del día a día nos alejan de poder sentarnos serenamente a disfrutar de un momento de encuentro con la familia, y el almuerzo se convierte a veces en un trámite que queremos solventar rápido, debemos cuidar estos momentos por diferentes motivos. Entre ellos, por ser un espacio ideal para que los niños desarrollen su autonomía para comer y aprendan el protocolo sencillo de la mesa.

comer en fam

Además, se propicia el diálogo entre los comensales y se desarrollan habilidades sociales como la escucha, el turno de palabra y la atención, tanto en las demás personas, como en lo que se está comiendo. Otro valor que puede compartirse en estas reuniones es el de la gratitud ante lo que se tiene y las personas que lo hacen posible.

  1. Ambiente de relax, Naturaleza

No es lo mismo comer de pie que sentado. Ni hacerlo en silencio que con la televisión puesta o en un restaurante lleno de bullicio. Todas las situaciones pueden tener su encanto: comer en familia, en una reunión social, solo en casa.

No obstante, de todas los entornos posibles para compartir una comida, recomendamos los que se realizan en un entorno natural de serenidad.

Ante la dificultad de disfrutar de estos espacios en la rutina diaria, os invitamos a buscar un hueco en la agenda semanal o mensual para regalaros salud, bienestar y belleza con una escapada a la Naturaleza en la que fusionaros con la parte más auténtica del planeta y de vosotros mismos.

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En un contexto de silencio, tranquilidad y pureza como el que ofrecen los espacios naturales, la compañía y los alimentos cobran una nueva dimensión. Prepararlos, estar en contacto con ellos, darles la dosis de cariño precisa para las personas con quienes vas a compartirlos transformarán las horas de las comidas en una experiencia llena de autenticidad.