El suelo es un organismo vivo y dinámico y hay que tratarlo como tal. Es por esto que la nutrición no se debe basar solo en los aportes de nitrógeno, fósforo, potasio, y demás nutrientes. 
Cuando un suelo ecológico está sano y equilibrado, la suma de macronutrientes y micronutrientes es mínima, porque en él existen multitud de microorganismos viviendo en simbiosis con la raíces de las plantas y realizando las funciones necesarias para ésta.
Captar nitrógeno atmosférico o romper fosfatos cálcicos transformándolos en sustancias asimilables por la planta, son algunas de las funciones que tienen dichos organismos y cuya función es cubrir todas las necesidades fisiológicas del vegetal.
En la naturaleza podemos ver estos ejemplos en bosques, en las dehesas, incluso en los oasis en desiertos donde sin intervención humana se encuentran sistemas exuberantes en equilibrio. Por esto podemos afirmar que realizar una biofertilización eficaz es muy sencillo: ¨basta con copiarse de la naturaleza¨, cuando lo hacemos no solo las plantas se nutren mejor y enferman mucho menos, sino que nosotros comemos alimentos llenos de vida y nutritivos.
Nutrición vegetal y sanidad vegetal van de la mano, por esto cuando nos proponemos cultivar de forma ecológica debemos tener presentes ambos conceptos. Una buena biofertilización comienza observando el suelo: con qué suelo partimos, su estructura, la materia orgánica y los diferentes biotipos que lo constituyen.
De esta manera comenzamos con una búsqueda de aireación en suelos por ejemplo, en suelos compactados; y en aquéllos que están demasiado sueltos por arenas se busca lo contrario a la aireación, esto hace del cultivo ecológico un cultivo de observación y conocimiento extenso.
Las ventajas de la biofertilización además de la obtención de alimentos nutritivos y 100% naturales, son múltiples. Protege el medio ambiente, el entorno y los trabajadores de las explotaciones agrarias.
Rico para el paladar y para el cuerpo, el tomate. Antioxidante descubierto en el tomate es 14 veces más potente que el resveratrol.
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